El calienta camas o también conocido como brasero era muy utilizado antiguamente para calentar las camas y las habitaciones de los más ricos. Sus sirvientas se encargaban de pasar este tipo de braseros por la habitación para que estuviese caliente cuando los señores se iban a dormir.

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En estas imágenes aparecen los llamados calienta camas. Esto consistía en una especie de recipiente con una tapadera y un largo palo por el que se agarraba. En el interior se insertaban ascuas del fuego y se metía debajo de la cama para calentarla. Una vez caliente se sacaba de la habitación para evitar intoxicaciones.